Soy Iraida Llucià y me dedico a la pintura y la ilustración.

En un momento de cambios en mi vida, tuve la oportunidad de decidir qué hacer con mi tiempo. Algo así como la típica pregunta de qué te llevarías a una isla desierta. Lo que decidí en ese momento fue llevarme tablas de madera, pinceles y pinturas. Empezar de cero te brinda la oportunidad de abrirte a lo nuevo... así empecé a crear mi propio lenguaje pictórico, representaciones que brotan de mi cabeza y buscan salida. 

 

Bestias inofensivas, árboles robustos llenos de vida, casas que refugian lo que está dentro de nosotros, lunas al alcance de la mano, frutos dulces, aves y peces que están a nuestro alrededor, aunque no los veamos ... Todo un mundo, el mejor de los mundos, el que tenemos. Un mundo de juego y poesía.

 

Al pintar, siento que hago algo importante. Siento que honro esta inquietante y maravillosa vida que nos sostiene.

 

Para mí, la palabra y la imagen van de la mano. 

Al pronunciar una palabra, desencadenamos un proceso mágico en el que hacemos visible un concepto. Y aunque la palabra represente una idea abstracta o nueva, esta se incorpora a la realidad del que la dice y la escucha.

 

Del mismo modo una imagen, al ser creada y vista, se incorpora a lo real. 

En mi pintura, la frontera que separa lo real de lo imaginario (si es que existe tal frontera) se desdibuja. En mí, aparecen imágenes reales, porque nacen de sensaciones reales, aparecen al observar no sólo con los ojos... son reales para mí. 

 

Me alegra el corazón conectar contigo a través de mis pinturas, reconociéndonos en un vínculo profundo que nos une... 

 

¡gracias por estar aquí!